sábado, 18 de octubre de 2008

Envuelto
manta del crepúsculo
sus trizas de tela vibran como las estrellas
o sus pupilas blancas
filosas.
Arrodillado
teselación de  la noche
manos que aprietan el aire de diamante
o escurren el agua
desde la altura.
Tres
piezas al amanecer
una quijada que mastica relámpagos
o susurra frases
que no lo calmarán.

Dos sílabas
un mito que me acompaña