lunes, 20 de septiembre de 2010

Equilibrio

Imagino una montaña gigante,
la imagino como el colmillo de una criatura
que, suprema, me susurra.

En la cima hace equilibrio
un árbol de cristal
y una serpiente que líquida
repta por superficies traslúcidas

Baja acariciando el gélido tronco
baja por el tronco
baja
por
el
tronco

Sutil caricia de un dedo a la boca
Gigante...
al colmillo afilado

Atrás nubes.

Arriba silencio.

Todo se podría caer en cualquier momento.

La boca a punto de cerrarse
sobre el dedo
como la noche sobre el día.