domingo, 4 de julio de 2010

Alma turista

Ajustada a tu cuerpo
recorre tu alma
tu silueta rebelde.

Va y viene,
se pasea por tu nariz,
salta a tu espalda,
por un momento se pierde.

Y cuando reaparece en tus ojos
siento mi alma
despertar de su sueño esquivo
y subir como un helicoide, hasta mis ojos.

Para ese instante, somos dos almas turistas,
gritándose poesía de un lado a otro
desde la cima de dos torres
que se besan.

1 comentario:

Seymour Glass dijo...

es increible todo lo que dicen las palabras en este poema, va muy lejos. lindísimo! :)